Todo lo que tengo es mi presente

Todo lo que tengo es mi presente
Burbujitas

jueves, 24 de noviembre de 2011

Para todas las sirenas...


Eres inevitable amor, casi como respirar, casi como respirar

llegue a tus playas impuntual, pero no me rendiré

soy tu amor clandestino

Soy el viento sin destino que se cuela en tus olas mi amor

soy amor, un clandestino, que se juega hasta al vida mi amor

 
clandestino

amar amar amor

no, no no no

mi amor clandestino que en el silencio y el dolor

se nos cae todo el cielo de esperar

inevitable casi como respirar

se nos cae todo el cielo de tanto esperar

Clandestino

El universo conspiró, inevitable corazón

clandestino eterno amor, pero me duele no gritar

tu nombre en toda libertad bajo sospecha hay que callar

Y te sueño piel con piel ahogado en besos y tus risas, amor

y me hundo en el calor que hay en tus mundos, en tu Mar,

llorando en silencio, temblando tu ausencia,

rogándole al cielo y fingiendo estar muy bien

Y te sueño piel con piel

ahogado en besos y tus risas amor y me hundo en el calor

que hay en tus mundos en tu Mar,

llorando en silencio, temblando tu ausencia,

rogándole al cielo y fingiendo estar muy bien

y te sueño piel con piel, ahogado en besos y tus risas, mi amor

y me hundo en el calor que hay en tus mundos en tu mar,

llorando en silencio, temblando en tu ausencia

rogándole al cielo y fingiendo estar muy bien

no no no no

mi amor clandestino, que en el silencio y el dolor

se nos cae todo el cielo de esperar, inevitable casi como respirar

se nos cae todo el cielo, de tanto esperar

Clandestino

No te engañes mas, ya no te mientas

si aire ya paso, ya paso y verdad, ya no tengas miedo

solo tú mantienes mi respiración, hace tanto que yo esperaba el viento amor

cae el llanto el cielo de esperar, hace tanto que yo espere tu luz amor

ay amor, ay amor, ayyy amor


sábado, 5 de noviembre de 2011

A lomos del tiempo

El tiempo galopa salvajemente y no me deja ni un segundo para respirar. Los momentos se suceden a un ritmo trepidante dejándome la sensación de que me estoy perdiendo algo.



Lucía crece tan rápido que se olvida que un día fue un gordo e indefenso bebé. Tan fuerte, tan viva, tan curiosa, tan mayor.


Por supuesto, yo crezco en la misma proporción. En realidad, no crezco, pero el tiempo pasa también para mí. Más canas, más cansancio, igual alegría, misma capacidad de sorpresa, nuevas lágrimas, inéditos lunes de madrugón y me pongo a dieta. Más viernes de menos mal que ya llegó el fin de semana. Otro curso, la Navidad, la Semana Santa, el verano.


Pero qué duda cabe que vivir todo esto es lo grande. Y lo inmenso es vivirlo bien. Con calidad. Creando y saboreando momentos felices que guardaremos en nuestra memoria por el resto de nuestra vida.


Señores, montemos al tiempo, sin miedo y cabalguemos con él, intentando, quizá en una quimera imposible, apaciguar su ritmo y saborear, a boca llena, cada segundo.


Por la vida.