Todo lo que tengo es mi presente

Todo lo que tengo es mi presente
Burbujitas

viernes, 25 de febrero de 2011

CUPIDO

Por qué me mira así?
Sus ojos se clavan en mi cuello, perforando, con una dolorosa calidez, mi piel y mi corazón se desboca.

Me falta el aire, pero a él no parece molestarle esta tormenta que me abate y me lleva a playas desiertas donde la música nos envuelve.

Poco imaginaba esta tarde que me iba a ver engullida por este agujero negro de las emociones. Una salida con amigos y, de repente, alguien nuevo que me perturba.

Una frase -¿quieres bailar?- y transforma mi hoy y, quién sabe, si mi mañana.

Presentado al concurso de relatos encadenados: http://www.escueladeescritores.com/concurso-cadena-ser

jueves, 24 de febrero de 2011

Carta a Lucía

Trasteando ayer por internet, pinché en un enlace, de un enlace, de otro enlace, vamos, que no recuerdo de dónde partí, en el que se me instigaba a escribir unas palabras a mi retoño, explorando sentimientos, recordando el momento cuando decidimos tenerla o cuando nos enteramos del embarazo, etc... para colmo, anunciaban un premio al  ganador del escrito emotivo... y claro..., ahí fui yo, de cabeza, que con 2 de pipas me animo y, sobre todo, si el tema es Lucía.

Mi querida Lucía:



Ya sé que eres muy pequeña. Tanto como un garbancito. Pero te siento tan grande y tan poderosa que iluminas con tu luz toda la oscuridad que antes albergaba mi corazón.


Llegaste de improviso. No te esperábamos. Después de tantos años, tantos esfuerzos, tantas ilusiones tiradas a la papelera en forma de arrugados informes: "estéril, estéril", gritaban.


Estoy segura que no eres de este mundo, eres un pedacito de estrella que, despistadamente, salió de aventuras más allá de la Vía Láctea y que, por suerte para mi, se coló en nuestras vidas.


Cómo pensar que ya estabas instalada cuando yo, al principio, no te reconocí? ese mes hice más deporte que nunca, bebí más que nunca, incluso, siguiendo el manual de salud responsable de una mujer de casi 40 años, me realicé mi primera mamografía.


A la primera falta evidente, y al cabo de unos días, me planteé la posibilidad de una prueba pero... ¿para qué? sería algún trastorno provocado por la edad, el estrés, mil causas desconocidas...


Juanjo, mi ginecólogo y amigo, me recomendó esperar unos días y fielmente, cumplí sus instrucciones. Pero allí estabas, en forma de mancha color rosa. Tú querías hacerte ver pero nosotros, escarmentados por tantos fracasos, no te veíamos y preferimos creer en un falso positivo que nos arrastró otro par de semanas más en el vaivén del desconocimiento.


De nuevo, tú, más fuerte que nunca, querías anunciarte, pero la voz de los profesionales auguraban una menopausia precoz. Esperamos sin fe, otro par de semanas más. Eras tan buena que ni una sola molestia me causabas.


Después de casi dos meses y necesitando una confirmación real de lo que ocurría, nos encaminamos hacia el hospital: una eco rápida y, si no era concluyente, un análisis de sangre.


- Qué pasa Juanjo, ves algo?


Y claro que vio. A ti, mi amor. Perfectamente instalada. Finalmente, no era una cuarentona premenopáusica sino una futura mamá añosa y primeriza.


Bienvenida, Lucía, mi estrella.

sábado, 19 de febrero de 2011

Ay, el amor...

Desnúdate mi amor, olvídate de él, arde la tentación, ven , muérdeme la piel

desnúdate otra vez, y desnúdame también que nuestros hoy verán amanecer

deja que tu instinto, rompa en erupción, yo se que tú lo deseas como lo deseo yo...

desnúdate mujer, hoy vas a ser infiel, cuando mis ganas te deshojen conoceras la libertad

desnúdate mujer, y entrégame tu ser, siente mis manos infinitas, robaré tu santidad...

La lluvia cae sensual  por tu cuerpo y el mio resbala el sudor de nuestra pasión

desnuda eres cristal, perfume de intimidad, tus pechos el manantial, donde me quiero ahogar

deja que tu instinto rompa en erupción yo se que tú lo deseas como lo deseo yo ...

Porque todo ha sucedido sin sentido y sin razon

es amor, asi es la pasión... tú y yo...

haciendo el amor, ay , el amor...

Desnúdate mujer y entrégame tu sed

bebe mis ganas infinitas, y saciaré tu santidad...


domingo, 6 de febrero de 2011

Viaje de un DVD rebosante de vida

Ha pasado solo un día desde que salí de viaje. Cargo un equipaje lleno de ilusión, experiencias, sonrisas, esperanzas y amor. Pero no me pesa, voy ligero como las mariposas en primavera. Solo quiero llegar pronto. Las personas que me esperan, en casa, están impacientes por verme, por sentirme.

El viaje ha sido rápido y fácil. Ya estoy aquí, esperando a que me recojan. Puedo sentir el latido de su corazón cuando, al acercarse hacia mi, me ven y saben que estoy aquí por ellos, la sangre les bombea a toda máquina gracias al combustible de la emoción.

Vaya un recibimiento que he tenido, apoteósico, eso sí que me hace sentir importante, mis maletas es el tesoro más preciado para mi, para ellos. Me han acomodado en el lugar más especial de toda la casa y esperan el momento adecuado para que, todos reunidos, me den oficialmente la bienvenida.

El momento ha llegado y tengo que cumplir mi objetivo, la misión para la que he sido creado. Todo está en silencio, con una luz tenue, y esperan con emoción reprimida. Es entonces, cuando despliego con maestría aprendida todo mi encanto, me desbordo, me dejo conocer, que me vean, que me sientan.

Una lágrima contenida todo el día se le rebela  a la abuela cuando ve a su nietecita, que viviendo a cientos de kilómetros, lejos de ella, le dedica una canción.

La abuela Paquita en Fuengirola