El viaje ha sido rápido y fácil. Ya estoy aquí, esperando a que me recojan. Puedo sentir el latido de su corazón cuando, al acercarse hacia mi, me ven y saben que estoy aquí por ellos, la sangre les bombea a toda máquina gracias al combustible de la emoción.
Vaya un recibimiento que he tenido, apoteósico, eso sí que me hace sentir importante, mis maletas es el tesoro más preciado para mi, para ellos. Me han acomodado en el lugar más especial de toda la casa y esperan el momento adecuado para que, todos reunidos, me den oficialmente la bienvenida.
El momento ha llegado y tengo que cumplir mi objetivo, la misión para la que he sido creado. Todo está en silencio, con una luz tenue, y esperan con emoción reprimida. Es entonces, cuando despliego con maestría aprendida todo mi encanto, me desbordo, me dejo conocer, que me vean, que me sientan.
Una lágrima contenida todo el día se le rebela a la abuela cuando ve a su nietecita, que viviendo a cientos de kilómetros, lejos de ella, le dedica una canción.
La abuela Paquita en Fuengirola |
Guau!!!!!!!!!!!que bonito Mon, me encanta leerte. Muak
ResponderEliminarGracias ;-), es un honor contar con opiniones como esta...y aunque creo que sé quién eres, dame alguna pistaaaaaaaaa la próxima vez.
ResponderEliminarMuchos besos.
Falta saber la canción, jjja, ¡¡¡tanta emoción!!!
ResponderEliminarBesitos Mon
Paquintosh
Gracias por intentar, intentar, intentar, escribir en el blog!!! te voy a hacer miembro honorario.
ResponderEliminarMuchos besos!!!